Letra de Jerusal�n, A�o Cero - Silvio Rodriguez
Letra de canci�n de Jerusal�n, A�o Cero de Silvio Rodriguez lyrics
De mano en mano se pasa la verdad
y en cada mano olvidar�
algo de cierto y tambi�n se llevar�
de cada mano el parecer.
Si camin�ramos calendario atr�s,
todo estar�a al rev�s.
Algunos dicen que es falso
y otros repiten que es cierto,
que entr� en Jerusal�n siendo de d�a,
se dice que su t�nica era blanca,
que iba posada en sus ojos
un ave del mediod�a.
Aquel fue tiempo de tumbas,
aquel fue tiempo de flautas,
de mercaderes, de Legi�n Romana.
Se dice que la chusma lo segu�a
que en su palabra sencilla
se lavaba la ma�ana.
El Rey de los jud�os,
el hijo de los hombres,
El Cristo, El Nazareno
lo llamaban.
Jerusal�n a�o cero y se cambi�
https://www.coveralia.com/letras/jerusalen--ano-cero-silvio-rodriguez.php
la suerte con lo que pas�.
Jerusal�n, a�o cero y Nazaret
y el caser�o de Bel�n.
Jerusal�n a�o cero fue el lugar
donde ocurri�, o donde no.
Fue enemigo del Imperio
y amigo de la palabra,
dec�a que todo era para todos:
se dice que ense�aba a los pastores
a compartir las ovejas
y a cuidarse de los lobos.
Tanta ense�anza hizo ruido
en el poder de los templos
y en la madera lo clavaron recio.
Se dijo que por mago o hechicero,
pero si la historia es cierta
fue porque hiciera silencio.
El Rey de los jud�os,
el hijo de los hombres,
El Cristo, El Nazareno
lo llamaban.
y en cada mano olvidar�
algo de cierto y tambi�n se llevar�
de cada mano el parecer.
Si camin�ramos calendario atr�s,
todo estar�a al rev�s.
Algunos dicen que es falso
y otros repiten que es cierto,
que entr� en Jerusal�n siendo de d�a,
se dice que su t�nica era blanca,
que iba posada en sus ojos
un ave del mediod�a.
Aquel fue tiempo de tumbas,
aquel fue tiempo de flautas,
de mercaderes, de Legi�n Romana.
Se dice que la chusma lo segu�a
que en su palabra sencilla
se lavaba la ma�ana.
El Rey de los jud�os,
el hijo de los hombres,
El Cristo, El Nazareno
lo llamaban.
Jerusal�n a�o cero y se cambi�
https://www.coveralia.com/letras/jerusalen--ano-cero-silvio-rodriguez.php
la suerte con lo que pas�.
Jerusal�n, a�o cero y Nazaret
y el caser�o de Bel�n.
Jerusal�n a�o cero fue el lugar
donde ocurri�, o donde no.
Fue enemigo del Imperio
y amigo de la palabra,
dec�a que todo era para todos:
se dice que ense�aba a los pastores
a compartir las ovejas
y a cuidarse de los lobos.
Tanta ense�anza hizo ruido
en el poder de los templos
y en la madera lo clavaron recio.
Se dijo que por mago o hechicero,
pero si la historia es cierta
fue porque hiciera silencio.
El Rey de los jud�os,
el hijo de los hombres,
El Cristo, El Nazareno
lo llamaban.