Letra de Se�ales - Callejeros
Letra de canci�n de Se�ales de Callejeros lyrics
Ni la iron�a de la ir�nica iron�a,
ni lo falso de la falsa falsedad
me explican lo que explican
los que explican sobre la verdad.
Soy un muerto encerrado
en un cuerpo vivo,
soy un vivo que hace tiempo se muri�.
S�lo siento pero siento
sin sentidos, s�lo hay descontrol.
A tu suerte, siempre r�stale una duda.
A esa duda, una posibilidad.
Si esa posibilidad se vuelve
tan loca, esa es tu verdad.
Para un juez no soy
m�s que un crimen perfecto.
Para otros, he sufrido
un gran rev�s.
S�lo soy un bicho
tan roto y sediento
como aquella vez.
https://www.coveralia.com/letras/senales-callejeros.php
Los cristales y pu�ales
son se�ales, son caminos
que tal vez hay que pasar.
Cuando todo se atropelle,
cuando la vida se calle y la muerte
juegue al juego del disfraz,
s�lo la sed y la ilusi�n van a quedar.
El ambicioso s�lo habla de ambiciones,
los diarios
mienten a diario y no entend�s
como es que tanta gente
s�lo compra noticias al rev�s.
Tal vez te asombra que no crea
ni en mi sombra o te sorprende
que a�n as� pueda cantar.
Es que cuando la canci�n canta
verdades ni la censura
ni el rencor la han de callar.
ni lo falso de la falsa falsedad
me explican lo que explican
los que explican sobre la verdad.
Soy un muerto encerrado
en un cuerpo vivo,
soy un vivo que hace tiempo se muri�.
S�lo siento pero siento
sin sentidos, s�lo hay descontrol.
A tu suerte, siempre r�stale una duda.
A esa duda, una posibilidad.
Si esa posibilidad se vuelve
tan loca, esa es tu verdad.
Para un juez no soy
m�s que un crimen perfecto.
Para otros, he sufrido
un gran rev�s.
S�lo soy un bicho
tan roto y sediento
como aquella vez.
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Los cristales y pu�ales
son se�ales, son caminos
que tal vez hay que pasar.
Cuando todo se atropelle,
cuando la vida se calle y la muerte
juegue al juego del disfraz,
s�lo la sed y la ilusi�n van a quedar.
El ambicioso s�lo habla de ambiciones,
los diarios
mienten a diario y no entend�s
como es que tanta gente
s�lo compra noticias al rev�s.
Tal vez te asombra que no crea
ni en mi sombra o te sorprende
que a�n as� pueda cantar.
Es que cuando la canci�n canta
verdades ni la censura
ni el rencor la han de callar.