Letra de La Muy Puta - Christina Rosenvinge
Letra de canci�n de La Muy Puta de Christina Rosenvinge lyrics
-�Qu� bien se conserva!- murmuran al pasar,
Cual lata de at�n guard� silencio sepulcral.
Para qu� explicarles que en mi hueco pectoral,
Guardo mariposas que no puedo desvelar.
Te quiero, vida m�a, m�s de lo que nunca sabr�s,
Por llegar a ti sobreviv� a lo dem�s.
Eres m�s que un �ngel, eres mi �nica verdad,
En este aterido mundo de presencia fantasmal.
Tarde como siempre, me tendr�s que perdonar.
Desconsideraci�n no es, es parte del Plan.
Todos los retrasos van sumando y al final,
A la decrepitud tambi�n tardar� en llegar.
Hasta la misma muerte de cansa de esperar,
Ir� a buscar a otro que no deje de fumar.
Hasta el d�a ciego en que me vuelva a se�alar
-Atrapen a esa rubia...
�Qu� le toca ya!
Dices que soy lenta, esa d�a ya ver�s,
Mis pies ser�n centellas rasgando la ciudad.
Ella, la muy puta, con un gesto impersonal
Mandar� un sicario con orden judicial.
-Usted como poeta maldita se tiene que suicidar-
Aqu� tiene la soga, aqu� el horno de gas.
Otro que disiente -Ella es una Popstar-
Le toca sobredosis eso dice el manual.
https://www.coveralia.com/letras/la-muy-p----christina-rosenvinge.php
Mis ex (tus ex) formando un castellet letal,
Coronar�n la fiesta de mi ejecuci�n final.
Los cr�ticos conceden la absoluci�n total,
Desde la compa��a les exigen santidad.
Mas en la hora escrita el cielo se abrir�
Y estas mariposas me rescatar�n,
A trav�s del viento me oir�n gritar
-Quiero vivir siempre, �Tengo
Tanto amor que dar!
Si logran abatirme, no tienes que llorar.
Tambi�n llegar� tarde a mi propio funeral.
Cuando el enterrador pregunte -�A qui�n hay que enterrar?-
T� di que no estoy lista para ir al m�s all�.
No sabe que ponerme, si de largo o informal
�guarden sus pa�uelos, que otra vez ser�!
Con ese, el de la pala, tambi�n ser� impuntual,
Morir� de hambre y frustraci�n profesional.
Los a�os son de plomo y se funden negro mar.
Yo estar� danzando sobre tumbas de cristal.
Peceras donde ninfas aprenden a nadar
Violadas por sus sue�os en delirio tropical.
Entre mariposas nos volvemos a encontrar,
Mi vestido de gaza se enganch� en un matorral.
As�, danzo desnuda, sin rostro, sin edad.
No me afecta el tiempo, ni la gravedad.
Cual lata de at�n guard� silencio sepulcral.
Para qu� explicarles que en mi hueco pectoral,
Guardo mariposas que no puedo desvelar.
Te quiero, vida m�a, m�s de lo que nunca sabr�s,
Por llegar a ti sobreviv� a lo dem�s.
Eres m�s que un �ngel, eres mi �nica verdad,
En este aterido mundo de presencia fantasmal.
Tarde como siempre, me tendr�s que perdonar.
Desconsideraci�n no es, es parte del Plan.
Todos los retrasos van sumando y al final,
A la decrepitud tambi�n tardar� en llegar.
Hasta la misma muerte de cansa de esperar,
Ir� a buscar a otro que no deje de fumar.
Hasta el d�a ciego en que me vuelva a se�alar
-Atrapen a esa rubia...
�Qu� le toca ya!
Dices que soy lenta, esa d�a ya ver�s,
Mis pies ser�n centellas rasgando la ciudad.
Ella, la muy puta, con un gesto impersonal
Mandar� un sicario con orden judicial.
-Usted como poeta maldita se tiene que suicidar-
Aqu� tiene la soga, aqu� el horno de gas.
Otro que disiente -Ella es una Popstar-
Le toca sobredosis eso dice el manual.
https://www.coveralia.com/letras/la-muy-p----christina-rosenvinge.php
Mis ex (tus ex) formando un castellet letal,
Coronar�n la fiesta de mi ejecuci�n final.
Los cr�ticos conceden la absoluci�n total,
Desde la compa��a les exigen santidad.
Mas en la hora escrita el cielo se abrir�
Y estas mariposas me rescatar�n,
A trav�s del viento me oir�n gritar
-Quiero vivir siempre, �Tengo
Tanto amor que dar!
Si logran abatirme, no tienes que llorar.
Tambi�n llegar� tarde a mi propio funeral.
Cuando el enterrador pregunte -�A qui�n hay que enterrar?-
T� di que no estoy lista para ir al m�s all�.
No sabe que ponerme, si de largo o informal
�guarden sus pa�uelos, que otra vez ser�!
Con ese, el de la pala, tambi�n ser� impuntual,
Morir� de hambre y frustraci�n profesional.
Los a�os son de plomo y se funden negro mar.
Yo estar� danzando sobre tumbas de cristal.
Peceras donde ninfas aprenden a nadar
Violadas por sus sue�os en delirio tropical.
Entre mariposas nos volvemos a encontrar,
Mi vestido de gaza se enganch� en un matorral.
As�, danzo desnuda, sin rostro, sin edad.
No me afecta el tiempo, ni la gravedad.