Letra de N�car Blanco Y Granate - El Drogas
Letra de canci�n de N�car Blanco Y Granate de El Drogas lyrics
Arrabal que tiembla en sangrante filo
engrampado al pantal�n
antes de cantar en trino
con la cinta del sombrero
desgastada por el sue�o
que mor�a esperando todas las madrugadas
no ensuciaba los zapatos con el barro
ni santiguaba las cruces con los dedos sucios
antes de tirar pinchazo por su ojo de cristal
era la luz del arrabal la que pon�a el brillo...
pon�a el brillo
En esos momentos buscaba el silencio
y la faca acariciada por sus dedos
n�car blanco y granate mezclado
para colorear como el vino otra sangre
https://www.coveralia.com/letras/nacar-blanco-y-granate-el-drogas.php
y despu�s de la estrategia y el jaleo
mientras todos atend�an al herido
un retoque de saliva por el pelo
y a buscar ese cuerpo tan querido
Fue quiz�s el tiempo m�s divertido
cuando la vida no pesaba nada
la ro�a se met�a por las u�as
al pisar el barrio
y ese color era nuestro abrigo
pero igual de r�pido llegaba ese momento
cuando la marca del hierro llamaba a tu puerta
y al salir a su encuentro se cruzaban
las noches de besos y de tormentas
que pa ti no estaban hechas de sue�o
engrampado al pantal�n
antes de cantar en trino
con la cinta del sombrero
desgastada por el sue�o
que mor�a esperando todas las madrugadas
no ensuciaba los zapatos con el barro
ni santiguaba las cruces con los dedos sucios
antes de tirar pinchazo por su ojo de cristal
era la luz del arrabal la que pon�a el brillo...
pon�a el brillo
En esos momentos buscaba el silencio
y la faca acariciada por sus dedos
n�car blanco y granate mezclado
para colorear como el vino otra sangre
https://www.coveralia.com/letras/nacar-blanco-y-granate-el-drogas.php
y despu�s de la estrategia y el jaleo
mientras todos atend�an al herido
un retoque de saliva por el pelo
y a buscar ese cuerpo tan querido
Fue quiz�s el tiempo m�s divertido
cuando la vida no pesaba nada
la ro�a se met�a por las u�as
al pisar el barrio
y ese color era nuestro abrigo
pero igual de r�pido llegaba ese momento
cuando la marca del hierro llamaba a tu puerta
y al salir a su encuentro se cruzaban
las noches de besos y de tormentas
que pa ti no estaban hechas de sue�o